Treinta y seis años de sangre en Guatemala
Gobiernos militares sentencian al País.
Con el inicio de los años de mil novecientos sesenta, los presidente de ese tiempo querían combatir contra los gobiernos comunistas de América y tras el fracaso de la Bahía de los Cochinos en Cuba por tratar de derrocar el gobierno que estaba uniéndose con el comunismo Ruso, Estados Unidos trataba bajo el comando de los boina negra y la CIA estadounidense trataba invadir Cuba con la ayuda del ejercito guatemalteco, no pudieron luego el presidente treinta y nueve de la Unión Americana Jimmy Carter, corto todo el poder económico del ejercíto guatemalteco esto fue bajo la presidencia del “Chacal”, el Coronel Manuel Arana, se comenzó a descontrolar el ejercito y el poder en Guatemala.
El actual presidente de los Estados Unidos Jimmy Carter creo bajo su mandato el poder hacia los Derechos Humanos, esto fue aplicado hacia todos los países pero en Guatemala parecía que fue una excepción innata. En el inicio de los ochenta y finales de los setenta la Unión Soviética y Cuba, empezaron a patrocinar a un grupo de personas rebeldes sobre el desprecio hacia los gobiernos militares. El General Lucas García asumió el poder y empezó con la matanza de los grupos armados que estaba en contra de su gobierno, uno de estas masacres fue cuando en la embajada Española un grupo de indígenas encabezada por el campesino Vicente Menchú, y personas que habían pasado por el gobierno fueron muertos exactamente 37 personas incluyendo este personaje que era el papá del Premio nobel de la paz años después, luego otras personas fueron desaparecidas como el embajador y un indígena, fueron secuestrados del hospital en donde estaban convalecientes, además fueron torturados y tirados muertos en la Universidad de San Carlos en donde los encontrarón torturados y con un letrero que decía “Cajal, comunista te pasara lo mismo”.
Luego de que el General Lucas terminó su mandato, por el golpe de estado que el colega General José Efraín Ríos Mont, golpista él continuo con la masacre de indígenas rebeldes que no querían a los gobiernos militares, ya que los gobiernos comunistas como Cuba y Rusia, denunciaron que Ríos Mont, no aceptara las condiciones que había dicho, este militarizo el país y los guerrilleros no tuvieron mas actividad.
El ministro de la defensa Oscar Mejía Victores dio golpe de estado a su Comandante José Ríos, y este comenzó un debate para que se reinstala la Constitución y convoco elecciones donde Vinicio Cerezo tomo posesión y luego de años el que seria presidente en el año de mil novecientos noventa y seis, Álvaro Arzú termino con la masacre de treinta y seis años con la firma de la paz que se conmemora el 29 de diciembre de cada año desde el noventa y seis, y puso fin al cese guerrillero y al ejercito para que siguieran combatiendo.
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